Por la Lic. María Lorena Carballo
La obra Plaza Pagano recibió el “Premio Nacional para la Identificación De Mejores Prácticas”, en la categoría Espacio Público. La misma consistió en la puesta en valor integral de la plaza y su entorno inmediato, ubicados en el centro histórico de El Bolsón (Rio Negro). Trabajó un equipo interdisciplinario y de diversas jurisdicciones.
El Bolsón es una localidad con una identidad muy fuerte a nivel nacional e internacional gracias a su Feria Artesanal, el paisaje, el lúpulo, las frutas finas y el estilo de vida de sus habitantes relacionados a la cultura, el arte y la sustentabilidad.
El proyecto nace como necesidad de revertir el estado de degradación que tenía la plaza, debido a su intenso uso del espacio público y a la falta de mantenimiento que había sufrido a lo largo de los años.
El diagnóstico era: grandes superficies de tierra, veredas en mal estado, falta de rampas peatonales y accesibilidad, equipamiento en mal estado y abandonado. Esto generaba una imagen de caos y abandono que repercutía negativamente en los turistas (fuente principal de ingresos) y, por ende en la Feria Artesanal.
Se apuntó entonces a renovar la imagen de El Bolsón en el espacio público. Se partió de la noción de que la Plaza Pagano y la Feria Artesanal tienen una influencia que supera su superficie y, por ende requerían de un ordenamiento integral del entorno para potenciar el uso del espacio verde y los programas tanto para los turistas como los bolsonenses.
En el año 2016, como asesora de la Secretaria de Interior y como rionegrina, tuve el inmenso placer de liderar este proyecto y aportar mi granito de arena.
En cuanto a la intervención, se planteó un eje peatonal sobre la calle Padre Feliciano que comunica el acceso de la ruta 40 (principal acceso a la ciudad) con la Feria. El mismo, es de carácter cívico ya que conecta los puntos principales de interés de El Bolsón: calle peatonal con la Iglesia principal y luego siguiendo el eje hasta la plaza Pagano, la zona del hospital, comisaria, etc. Asimismo, se instaló un puente peatonal sobre el espejo de agua, que lo cruza dando continuidad al eje y uniéndolo con el resto de los espacios importantes de la Plaza y entorno: Anfiteatro, Feria Artesanal e instalaciones de la Municipalidad.
Ya en la plaza; se formalizaron los usos que se dan actualmente potenciando el borde del espejo de agua como un lugar de paseo y de encuentro. De esta manera, se buscó que los usuarios se acerquen al espejo de agua y el uso de la plaza como espacio verde se concentre en este sector y así, descongestionar el perímetro de la plaza para la feria. Se intervinieron las veredas perimetrales, se hicieron rampas de acceso asegurando la accesibilidad y segura circulación de mamás con carritos y personas con capacidades diferentes. Se puso en valor el anfiteatro dándole un tamaño más funcional con el entorno, lo que permitió ganar en superficie verde. Se actualizo el patio de juegos (que era prácticamente inexistente). Se incorporaron cestos de basura, bancos y mesas, paisajismo y finalmente, se realizó una fuerte intervención en el alumbrado. Ahora el alumbrado es LED lo cual por un lado, reduce el consumo y alarga su vida útil, facilitando el mantenimiento y contribuyendo al medio ambiente y; por el otro, permitió que los vecinos recuperen la plaza de noche, tanto para estar como caminar y cruzar. Es decir, se volvió un lugar seguro y de encuentro, también de noche.
UNA OBRA DE TODOS
Para que una obra en el espacio público pueda “sobrevivir”, precisa del cuidado de la ciudadanía, quien apropiándose la preserva, mantiene, respeta y vive plenamente. Y con esta obra se logró precisamente esto: que los bolsonenses vuelvan a sentir el orgullo de recuperar su plaza principal.
En este sentido, quisiera resaltar los factores que hicieron al éxito de este caso, en primer lugar sin un trabajo en equipo entre la Nación y el municipio no hubiese sido posible avanzar con un proyecto que incluya la mirada local y no simplemente, copiar experiencias exitosas de otras ciudades. Esta mirada local sirvió también para la encuesta que se realizo acerca del proyecto.
A menudo los procesos participativos tan habituales en Capital Federal, en algunas ciudades del interior cuestan un poco más. Entonces, sucede que se escuchan quienes más gritan, que no siempre (casi nunca) son la mayoría. Por esta razón, decidimos hacer una encuesta para saber la opinión de la población respecto a cómo veían la plaza (si coincidía con nuestro diagnóstico), qué intervenciones les gustaría ver, cuáles eran prioritarias, etc. La muestra de alrededor de 500 casos, más que representativa de los casi 20.000 habitantes que tiene la localidad, ayudo a definir prioridades y a ratificar el proyecto propuesto. Allí los bolsonenses, nos dijeron la necesidad prioritaria de hacer rampas de accesibilidad, arreglar el espejo de agua, mejorar la iluminación y sumar superficie verde a la plaza.
También se hicieron reuniones con los concejales para contarles el proyecto y con los feriantes para que conozcan la propuesta y puedan generar aportes. A raíz de esto, se incluyeron mesas de ajedrez para los feriantes que juegan en la plaza.
Es decir, cuando el proyecto empezó a materializarse (previa licitación pública) ya tenía el conocimiento y consentimiento de la ciudadanía que gracias a una participación activa, se sumó a la propuesta. En general no estamos acostumbrados a ver una encuesta como herramienta de participación ciudadana en proyectos urbanos de este estilo, pero en este caso necesitábamos saber la opinión de la mayoría silenciosa y allí fue donde apuntamos.
POTENCIAR LAS INVERSIONES
Al principio mencionábamos que El Bolsón es conocido a nivel nacional e internacional, entre otras cosas por el lúpulo que es una materia prima que se usa para la producción de cerveza. Es decir que parte de la marca identidad de la ciudad tiene que ver con esta producción.
Sobre la calle Padre Feliciano, frente a la Iglesia principal, había unos terrenos baldíos que, nos comentaron, eran de privados que no se animaban a invertir en locales comerciales ya que el entorno no acompañaba, sumado a la estacionalidad del turismo que no lo hacía rentable todo el año.
Al ser uno de los ingresos a la ciudad por la RN 40, uno de nuestros objetivos fue lograr que para el privado sea atractivo invertir y de esta manera, generar trabajo genuino para los bolsonenses. Soñábamos con cervecerías artesanales, tan en boga en estos tiempos, que reforzaran su sello diferencial, mostraran la producción local e invitaran a pasar por esta localidad comarcal sureña.
Cabe mencionar que El Bolsón es la ciudad principal de la Comarca Andina (paralelo 42) formada por otras localidades como Lago Puelo, Cholila, El Hoyo, El Maiten. En todas las localidades, los productos son similares pero cada una tiene un diferencial que es su especialidad. Por ejemplo, el lúpulo, la fruta fina, floricultura, etc. Queríamos resaltar la especialidad de El Bolsón, aportando así al cluster Comarca Andina y, al mismo tiempo, diferenciándolo de Bariloche (localidad cercana).
TRABAJO EN EQUIPO
Por último, pero no menos importante, el corolario de todo trabajo en equipo, es el reconocimiento público que pueda recibir.
En este punto, es esencial mencionar a quienes lo hicieron posible.
Al Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda de la Nación, liderado por Rogelio Frigerio; a la Secretaria de Infraestructura Urbana, a cargo de Marina Klemensiewicz y; a la Secretaria de Interior, a cargo de Sebastian Garcia De Luca, que financió la obra. Al Diputado Nacional Sergio Wisky, oriundo de El Bolsón y, quien gestiono el aporte de privados para la realización del proyecto ejecutivo. Al municipio, gestión Bruno Pogliano, por la sinergia y equipo local para llegar a buen puerto.
Y a la Sociedad Central de Arquitectos (SCA), institución encargada de evaluar y premiar los más de 60 proyectos presentados por municipios de todo el país.
María Lorena Carballo, Politóloga (UBA). Trabajó en el Ministerio de Ambiente y Espacio Público del GCABA (período 2008 – 2013) y en el área de Proyectos Comunales, de la Secretaria de Gestión Comunal y Atención Ciudadana (2013-2015).
Ciudadanía Metropolitana