“(Vamos a) avanzar con gobernanza metropolitana”, expresó Brugada, el pasado 6 de noviembre, al presentar los temas iniciales de la agenda en común.
Durante décadas un obstáculo para atender problemas comunes han sido las diferencias políticas entre los gobiernos de las entidades del centro del país, señala Armando Rosales, presidente de la Asociación Mexicana de Urbanistas (AMU) en CDMX.
“Es la primera ocasión en la que gobiernan las entidades personas del mismo partido (Morena), también la mayoría de los municipios y las alcaldías metropolitanas están gobernadas por el mismo partido, eso representa una oportunidad de oro”, señala el especialista a Expansión Política.
Policía Metropolitana, respuesta ante la delincuencia organizada
Brugada encabeza el proyecto para crear una Policía Metropolitana entre la Ciudad de México y el Estado de México, que en conjunto suman 26.1 millones de habitantes de acuerdo con el Censo 2020 del INEGI.
“La Ciudad de México no es una isla, no podemos encerrarnos ni amurallarnos en la Ciudad de México, tenemos que trabajar en lo metropolitano. Por eso instruyo a nuestro querido secretario de Metrópolis, Alejandro Encinas, que avancemos en la construcción, junto con nuestro secretario de Seguridad, de una Policía Metropolitana para la Ciudad de México”, indicó la jefa de Gobierno el pasado 8 de octubre, al instalar el Gabinete de Seguridad capitalino.
Armando Rodríguez, consultor en seguridad nacional, considera que esta es una estrategia de respuesta ante delitos operados por grupos o células de la delincuencia organizada, los cuales actúan a partir de acuerdos o corrupción con autoridades locales, además de aprovechar los límites entre las entidades para evadir su captura.
“Hay pequeños grupos criminales que operan a nivel regional aprovechando la jurisdicción, es decir, esta división entre los estados y municipios, lo que genera es que las instancias de seguridad y justicia no puedan actuar más allá de sus estados. Por eso es muy importante la cooperación pero también la homologación de capacidades”, explica el especialista.
Una de las prioridades será atender la tala clandestina en el Bosque de Agua, el cual es el principal punto de recarga de los acuíferos que proporcionan alrededor del 70% del agua necesaria para centros urbanos como Toluca, Cuernavaca y la Ciudad de México.
Al sur, en los límites entre la capital y Morelos, la tala clandestina es una de las principales actividades criminales, con grupos que operan en municipios como Cuernavaca, Jiutepec, Cuautla y Yautepec. En esta zona se han detectado grupos con posibles vínculos con la Familia Michoacana, detalla Rodríguez.
En el oriente de la ciudad, en los límites con el Estado de México, actúan bandas dedicadas al “huachicol” o robo de combustible, donde se ha relacionado la presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Al poniente –como Álvaro Obregón y Cuajimalpa–, también hacia la colindancia con la entidad mexiquense, se tiene registro de delitos como secuestro y robo a transporte, con la presencia de grupos delictivos como Los Rodolfos.
El especialista en seguridad ve la creación de una Policía Metropolitana como un proyecto con potencial para tener una zona metropolitana más segura, sin embargo, advierte desafíos para su funcionamiento.
“Va conllevar el generar y compartir información no sólo de las instancias de seguridad pública de los tres estados, sino también las instancias de justicia, las fiscalías. Uno de los desafíos subyacentes es evitar la corrupción y tener mayor capacidad para actuar”, indica el maestro en Relaciones Internacionales por la UNAM, quien señala que un delito compartido es la extorsión.
Agua, movilidad y ordenamiento territorial
En su primer acto tras tomar protesta como jefa de Gobierno, Brugada convocó a conformar un Cabildo Metropolitano para trabajar sobre el abasto y conservación del agua.
“Convoco, entonces, a instalar un Cabildo Metropolitano donde concurran los estados de la República, los municipios y la federación para trabajar juntos en bien de la gente. Vamos a trabajar de la mano de nuestra presidenta Claudia Sheinbaum y las gobernadoras y gobernadores de la región centro en soluciones que nos permitan garantizar el derecho humano al agua”, dijo el 5 de octubre en el Teatro Metropólitan.
El agua es un eje principal en la agenda de coordinación, en especial ante la disminución durante los últimos cinco años del agua disponible en el Sistema Cutzamala, del cual depende el 30% del líquido para los habitantes de la Zona Metropolitana.
“Lo principal es cómo vamos a manejar el agua, esta ciudad es inviable si no tenemos un abastecimiento adecuado de agua. El Sistema Cutzamala, pese a que se recuperó un poco con las lluvias de este año y afortunadamente la transición de los fenómenos meteorológicos del Niño a la Niña permitió que lloviera un poco más, no se alcanzaron a recuperar las presas y en este momento están abasteciendo menos de lo que abastecían hace dos años”, apunta Armando Rosales.
Aunque gracias a las lluvias registradas por fenómenos como tormentas tropicales y huracanes las presas se encuentran al 66.98% de acuerdo con el monitoreo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) actualizado al 15 de noviembre, no han recuperado su nivel histórico de 82.8%.
El presidente de la Asociación Mexicana de Urbanistas ve también como un tema principal la movilidad, pues hasta el momento son limitadas las opciones de transporte público masivo –como el Mexibús, el Tren Interurbano y pocas estaciones del Metro– que conectan la Ciudad de México con las otras entidades que integran la metrópoli.
“Los sistemas de transporte están altamente fragmentados, el Metro casi no cruza con el Estado de México: salvo la Línea B, las demás están dentro del territorio de la Ciudad de México, cuando el Metro por su propio diseño debería ser un sistema metropolitano que permitiera una mejor movilidad”, comenta.
A la par, varios proyectos prioritarios de la presidenta Claudia Sheinbaum están enfocados a conectar a través de trenes la Ciudad de México con el Estado de México en puntos clave como el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), y otras entidades como Hidalgo y Querétaro.
Rosales también señala la necesidad de coordinarse para la expedición de placas de vehículos y licencias, verificación vehicular y aplicación de multas de tránsito, a fin de mejorar la movilidad.
En la agenda metropolitana trazada por Brugada se plantea la coordinación para el ordenamiento territorial, tenencia de la tierra, así como atracción de inversiones y economía circular.
La jefa de Gobierno ha planteado que para 2025 serán consultados los instrumentos de planeación de la Ciudad de México –el Plan General de Desarrollo y el Programa General de Ordenamiento Territorial– que durante la administración de Claudia Sheinbaum en la capital no lograron ser aprobados.
Para Rosales, se requiere de homologar los instrumentos de planeación, reglamentos y normas entre las entidades que conforman la Zona Metropolitana, con el fin de crear un marco que permita y obligue a la coordinación entre las entidades, sin depender del partido que gobierne.
Incluso, plantea la utilidad que podría tener la creación en el futuro de un Instituto Metropolitano de Planeación.
“Cuando haya en el futuro cambios de gobierno, cambios de partidos políticos, estos esfuerzos si no son institucionalizados y no quedan en un plan, pueden generar problemas hacia el futuro”, apunta el doctor en Estudios Urbanos y Ambientales por el Colegio de México (Colmex).
“El tema central si queremos tener una ciudad más armónica, más habitable y más vivible es verla como una entidad metropolitana organizada. Necesitamos que no siga funcionando de manera inercial los sistemas de transporte, los sistemas de seguridad”, agrega.
Fuente: politica.expansion.mx/